Tener mucha precaución y cuidado con respecto a algo. Ser muy prudente y temeroso en una situación dada. Ejemplos: "Ándate con pies de plomo, que se están repartiendo hostias y tú llevas muchos números." // "Los auditores anduvieron con pies de plomo porque sabían que había altos directivos implicados en el pufo."